Por qué no vienes y
me besas como nunca antes lo has hecho,
Por qué no confiesas
lo que sé hace años y nadie ha hablado,
Es que ya ha pasado
mucho tiempo y es en vano dejarlo de lado,
Porque tu nombre fue
grabado con fuego en mi pecho.
Porqué justo ahora y
no antes cuando éramos dueños del mundo,
Quizás es la
distancia, las noches en vela, el aburrimiento,
Quizás un poco de
todo y nada, pero es verdad lo que siento,
Siempre para ti,
siempre contigo, siempre mi amor profundo.
Porqué ahora todo me
suena a tu voz, y en cada cara veo tu rostro,
Todo esto es culpa
mía por ese afán de querer llevar todo hasta el limbo,
Y ahora son mis
lágrimas las que en silencio limpio,
Porque no son tus
labios los que beso sino que son los de otro.
Y si desde un
principio eras tú mi príncipe y yo
estaba ciega,
¿Es muy tarde para
intentar ser yo quien te rescate del dragón?
¿Pongo a tus pies los
restos que quedan de este mutilado corazón?
Porque ya me aburrí
de ser la que lo obvio siempre niega.
Por eso yo te
propongo que si es mutuo, me lo digas,
Intentémoslo solo
para terminar con este calvario
Porque ya los santos
no me escuchan y he destrozado el rosario
De tanto suplicar por
amnistía y solo recibir migas.
Sé mi galán, mi
compañía y como toda la vida, mi mejor amigo,
O tal vez, mejor
nada, silencio y vacío sepulcral,
Pero sé lo suficiente,
la causa de mi alegría o la de mí mal,
Porque yo si soy
algo, aunque ese algo es mejor contigo.
No te pido mucho,
nada que ya no me hayas dado: un beso,
Para saber de una vez
si es fantasía o es real,
Y si es cierto todo
esto, seré tu amante más leal,
Como alguien
enamorado que peca de preso.
Es que si es esto no
llega a puerto será uno de esos romances destructivos,
Porque tarde abrí los
ojos y vi los tuyos de frente,
Comprendiendo en ese
punto que es mí motivo el quererte,
Y así mismo como tus
besos me condenan, se me hicieron adictivos.
Por qué no bailas
conmigo un par de canciones,
Y si puedes detén el
tiempo un instante,
Porque son muchos los
años que has estado distante
Y antes quiero
disfrutar un rato de mis falsas ilusiones.
Por qué no duermes a
mi lado esta noche tenebrosa,
Y me permites sentir
el calor que emana de tu piel sin
temores,
Así tengo la excusa
de abrazarme a ti si llegasen a haber temblores,
O si tengo la pesadilla
más cruel y dolorosa
Dame la libertad de
poder llamarte mío y propio, sumiso y dictatorio
Y pongámosle un final
feliz a esta larguísima historia
Que se ha pospuesto
con una farsa notoria,
Ante la mirada
expectante del universo contradictorio.