sábado, 3 de diciembre de 2016

INSOMNIO.






1:01 am. 

No hay viento.

Cantan los grillos cerca de las líneas del tren llenas de polvo. Pronto pasará con la carga de la madrugada anunciando que es entrada la noche con su bocinazo tan característico, pero sigo embalsada con aquel arrullo que cuenta historias que aún no logro entender. 

Está oscuro y las estrellas brillan imponentes. ¡Es tan hermoso el mundo cuando se le quiere encontrar hermoso! 

No quiero irme a casa, aunque ya comencé a estorbar. 
Se me olvida que el universo gira de a pares y los parias, siempre estorbamos. Quizás sea esta suerte de rebelión a lo impuesto que me tiene aquí, en dominio ajeno, en una banqueta, con un cigarro a medio consumir y un vaso con agua cuyos hielos desaparecieron, observando sin querer interrumpir la magia que circunda a las personas que se aman. 

Estoy feliz por ella... Que mi amiga sea feliz, alegra la soledad. 

¡He actuado tantos oficios! Pero nunca el de violinista clandestino oculto en las sombras, haciendo de cuentas que estoy ausente de los susurros oídos a lo lejos. Tendré que fingir sorpresa cuando quiera contarme. El trabajo de amiga, nunca acaba.

Ladra un perro y otro se pasea por la calle quejándose porque no puede entrar a jugar con el que ladra... Insisto, el universo gira de a pares. 

Sonata de claro y luna suena en mi mente. Siempre me gustó por la melancolía que carga, algo así como el momento en que se baraja la opción entre continuar o poner fin a todo, respirar o decidir la asfixia, volver al cielo o arraigarse con ahínco a las grietas en la tierra. La ambivalencia en su máxima expresión. 

Tengo la sensación de que va a temblar... 

El eje del ciclo está mal. 

Todavía no pasa el tren con su carga. 

Siguen los grillos chillando a la distancia. 

Los perros de silenciaron. 

Mis ojos suplican cerrarse tras casi 40 horas sin dejar de parpadear. 

Cansancio físico  versus la algarabía de la juventud. 

La mierda brillando como oro. 

Comienza a hacerse notar el claveteo de pensamientos aglutinados desde hace tanto sin poder salir por falta de tiempo, y buscan pasar desapercibidos bajo un vano dolor de cabeza. He aguantado peores. Una jaqueca no me va a doblegar, si he traído agonizando el corazón por años. El dolor que no es dolor es lo que consume las fuerzas. Lo inexplicable. Lo fatuo. Lo tuyo. Eso duele. 

Dejó de sonar la música camuflada en los silencios y es evidente lo intrasendental de mi presencia aquí, sin embargo quiero darle un sentido a tanta idea suelta, sin encontrar ninguno. 

Desde la calle, me piden que toque un Réquiem.... Réquiem para una paria... Réquiem para la consonancia de un nombre en fuga...Réquiem para poder dormir en paz. 


Volvió llorando. 

No era la magia que circunda a las personas que se aman, era la muerte dictando sentencia. Le exigía dejara exangüe sus venas porque se le había acabado la cuota de amor... El trabajo de amiga nunca termina... El problema radica, ahora en qué bando elegir: La muerte o la amiga.

Acaba de pasar el tren con su bocinazo característico, una hora más tarde de lo habitual, y el mundo sigue siendo hermoso. Puede ser que mis ojos se hayan acostumbrado a ver cosas que no son, a reconocer a los espíritus chocarreros negros de cenizas y confundirlos con la dulzura residual del recuerdo de un primer beso. Todo depende del prisma ¿No? 
Es la relatividad haciendo de las suyas. 

- ¿Qué haces? - Me preguntan. 
- Escribo un poco. - Contesto. 
- ¿Con quién hablas Francisca?  -Te estás delatando, pensé.  
- ¡Ah con nadie! ¡Es la falta de sueño! 
- Si sigues así  no verás el 2017. 
- Gajes del oficio... Tranquila. ¡Ya! Me voy. Es tarde. Hablamos mañana. 


Los espíritus chocarreros también hablan...No todos los escuchan... Así como sigo sin entender la desesperación de los grillos, ni el porqué de esta extraña sensación pegajosa de esperanzas sin cuna...


"¿Nos vamos?" Dije al aire y partimos los tres: La Muerte, El Destino y yo.


ESCRITO POR: FRANCISCA KITTSTEINER..

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

© Francisca Kittsteiner, 2008 - 2009.
- Franykityzado por Klaus, ©2009.