jueves, 25 de diciembre de 2008

SIN SIQUIERA DECIR ADIÓS


Se fue ese día, sin siquiera decir adiós,
Quizás tenía que ser así, tal vez lo mejor para los dos,
Él seguiría su camino y yo, encerrada en el dolor
Que dejaría al verlo salir de mi vida,
Sin que nada pudiera detener mi desolación

Se fue ese día, sin siquiera decir adiós,
Con la vista hacia el piso y hecho piedra el corazón,
Volteó la cara, ignorando la condición,
De que sus ojos ya explotaban, convertidos en llanto y desesperación.
Compartimos la misma calle, donde el destino nos juntó,
Caminé cabizbaja, escondiendo la afición
De verle pasar por mi lado, siendo esa, la ultima ocasión.

Se fue ese día, sin siquiera decir adiós,
Quitó su mirada de mis ojos, nada dijo y por la calzada siguió.
Me detuve al poco andar, mi cuerpo no obedeció,
Observando a lo lejos, aquel hombre que lloraba sin compasión
Mientras, también lloraba yo.
Y se fue ese día, sin siquiera decir adiós,
¿Quién sabe si el tiempo nos cuente esa, la historia de nuestro amor?

ESCRITO POR: FRANCISCA KITTSTEINER



gracias consuelo por la imagen, faltaba el toque de la familia aqui...te adoro nueri!

domingo, 21 de diciembre de 2008

DE SORPRENDIDO A SORPRENDENTE.


De sorprendido a sorprendente,
¡qué rápido cambian las cosas! si lo piensan lentamente:
yo que ayer, no deseaba quererte,
hoy te convenzo entre palabras que no sigas a tu mente,
no obedezcas a tu ingrata razón y disfruta lo ocurrente,
no sigas a tu corazón, solo a lo que escuchas profundamente.

Cierra los ojos e imagina el presente,
en el que seamos los dos amantes permanentes,
que venzamos al tiempos con armas contundentes,
que aniquilen la barrera de un amor doliente.

Así se sencillo, de sorprendido a sorprendente,
la más fiel, fui, de tus confidentes
y hoy guardo tu cariño como un tesoro decadente,
tras las llaves oxidadas de reconcomios impertinentes,
que nacen cada día con el calor del sol naciente,
y que se destruyen complacidos, con el fulgor de la luna estremeciente.

De sorprendido a sorprendente,
hoy te cuento, en pequeño, lo que siento desde siempre,
¡te amo! no lo escondo, nunca más de tu mirada incandescente
que ilumina a mis sentidos de una manera incipiente,
y del mismo modo acalla los prejuicios de la ingrata gente,
que se alimenta de desepciones que sufren los imprudentes,
como nosotros que tentamos a la suerte
desde en momento en que juramos pasión que acabaría en la muerte.


***todo es falso....nada es cierto.....


ESCRITO POR: FRANCISCA KITTSTEINER

martes, 9 de diciembre de 2008

querido papa noé:


querido papa Noé:
ya son 16 las veces que te he escrito, la mayoría es para pedirte miles de cosas sin sentido, para hacerte perder el tiempo leyendo, las peticiones materiales, y luego al transcribirlas a una interminable lista que agobia tu vida y acorta tu vista. Sin embargo, esta vez es para preguntarte un par de cosas, sí ese será mi regalo de navidad ¿estas de acuerdo?
lo primero ¿ por qué la gente ha dejado de creer en ti? sé que suena un poco cursi, pero la verdad es que, hay miles de personas que piensan en lo mismo y no se atreven a preguntar, para no tener que dejar esa cubierta falsa se calzan cada vez que abren los ojos....
¿por qué los niños han cambiado tanto? ya no son esas criaturas tiernas y afables que solían ser, sino que se han convertido en miniaturas de los adultos, que andan con un notebook bajo el brazo desde el minuto en el que nacen, dejando de lado y más que nada, olvidando aquellos tiempo en que nosotros nos entreteníamos gastando las tardes jugando con la nada y haciendo algo de lo simple.... ( con el barro... qué tiempos aquellos)
¿por qué ya no has vuelto a surcar los aires, llenando la brisa de tu inconfundible jo-jo-jo? se te extraña.....
¿ por qué la codicia reina, ya no pidiendo por un año se satisfacción, si no que al contrario, pidiendo bicicletas, nintendos wi, y miles de tonterías, que a la larga son solo cables y mas cables conectados? hace falta un poco de lo que solía ser esta tierra, cuando yo la conocí?.....

esas eran mis preguntas..... un beso y un abrazo gigante para ti y dile a la señora klaus, que no se desgaste tejiendo botas de lana, que ya vienen echas (irónico ¿no?) y que me envie una de esas galletas de jengibre que solo ella sabe hacer.... dile a los renos que descansen y que los adoro...


¿cuándo te volveré a ver?.....

saludos y siempre tu amiga.... francisca kittsteiner

domingo, 7 de diciembre de 2008

EL ORIGEN DEL AMOR



Cuentan los cantares de los silencios
que cuando abundaban los sonidos,
existió un coqueteo de pensamientos
con los que adentro estaban dormidos.

Una historia de locura de lo concreto
junto con lo imaginario, llena de recuerdos
pertenecientes a las sensaciones y a los secretos.
Vuelan altivos y oscuros los cuervos,
vigilando las conquistas de los externos,
impidiendo se conciba a un híbrido de sentimientos.

Cuentan los cantares del silencio
que cuando aún el tiempo no era tiempo,
se imaginó al más tierno espectro,
lleno de cosas nuevas los dos primeros en el reino.

Un aroma de pasión encerrado por lo eterno,
se desató con aquel nacimiento,
despertando los latidos de un músculo inerte,
dentro del pecho de los dos únicos residentes.

Pasaron los días, las semanas, los meses,
y las miradas se llenaban de brillos intermitentes,
haciendo caer bajo el fulgor de la ilusión, a los habitantes,
de un pedazo del cielo, fundado en las tinieblas errantes.

Cuentan los cantares del silencio,
que aquella mujer y ese hombre,
habían inventado una nueva forma de dolor,
a la que pusieron por nombre,
cuando la existencia era irrevocable: amor....


ESCRITO POR: FRANCISCA KITTSTEINER

martes, 2 de diciembre de 2008

¿ESTOY SOLA?

Creí que estaba sola, creí que había dejado de ser atormentada por los fantasmas de mi pasados o simplemente, de todo resto que se asemeje a un fantasma, pero no. Sigo estando sola, sentada en el sillón más cómodo de los que jamás se pudo haber fabricado, y tiembla el café en mi mano. No sé por qué, solo tiembla, como si algo lo moviera a propósito de mis lánguidos brazos. Sigo estando sola, pero siento como alguien me observa desde el pasillo que da a las espaldas del sillón, con una gélida mirada que carcome hasta el tuétano de mis huesos, como si buscase algo y no lo encuentra. Tomo un poco de café, antes de que el temblor lo derrame por completo sobre mis ropas.
Si estoy segura de que estoy sola, entonces ¿por qué se escucha el demabular de unos zapatos pesados cerca de mi? No lo sé ni me atrevo a preguntar la causa. Me repito una última vez, de que estoy sola, sin nadie cerca.

Se apagan las luces del cuarto y se prenden las del pasillo, si el mismo del cual me siento observada, pero ya no hay ruidos, solo las luces que parpadean cuando decido dar vuelta la cara para echar un vistazo. Comienzo a sentir miedo, no de lo que fuera que estuviese haciendo interferencia en la energía, sino de estar sola con mis pensamientos, y entrando en una pesadilla.

Tomo otro sorbo de café, ya no queda nada en la taza, unas cuantas gotas. Pasa algo rozando mis rodillas, como si fuese una nube transparente que se ha alojado dentro de mi casa. Siento frío. ¿iré a morir? ....

Las luces se apagan, ya no hay ruido, no se escuchan los pasos y la nebulosa ha desaparecido sin dejar rastro, pero la taza de café amenaza con lanzarse al vacío en un acto suicida, todo esto sin que nadie la toque, y mientras me vuelvo a repetir de que estoy sola.

Tomo mis cosas y me dirijo al pasillo, cobarde, lo admito, pero me dirigí. Apagué los interruptores, para evitar una electrocución innecesaria, y escuchaba las tersianas de la taza que iban al mismo ritmo que las manecillas del reloj. Volvió la nube.... tocó mi hombro, pronunció mi nombre con todas las letras: FRANCISCA. Casi morí.
¡estoy sola!- repetí hasta el cansancio, como si fuese mi credo: creo que estoy sola, creo en la soledad toda poderosa....

Miro al espejo y veo mi rostro pálido de tantas cosas, por la falta de café. De un momento a otro, algo distrae mi atención y dirijo mis ojos hacia el final del pasillo. Está oscuro y silencioso, pero no hay nada raro en él, mas sí en el espejo, porque mi reflejo no se movió. Sé que me mira aunque mi cara este mirando hacia el este... ¡me mirará!

Tres segundos para que sean las tres, y la casa cae en tinieblas, extingo el resto de café, y la taza blanca queda vacía... al igual que mi cabeza. Comienzo a sentir miedo de nuevo y no sé por qué.

Camino hacia mi cuarto, al final del pasillo, y en la cama veo como se hunden las frazadas, como si un cuerpo se posara en ellas, y los adornos de cristal empiezan a cantar desesperados al tacto de lo invisible, pienso que puede ser el viento, mas luego se aclara mi mente y llega a la conclusión de que es imposible, no hay ventanas abiertas ni puertas por donde se pueda escapar el aire. La colcha ya había vuelto a su posición normal y otra vez silencio.

volví al cuarto principal, evitando mirar al espejo que conservaba intacto mi rostro mirando hacia el frente, y tomo asiento en el primer sillón que encuentro, la taza de café estaba llena de nuevo, de la nada, y la nube de miedo se había alzado sobre mi cabeza. Mi mirada se pierde y siento como mis pupilas se dilatan en la sombra. Las baldosas empiezan a transfigurarse al reflejar el largo vestido de mi tormento.
-¿qué quieres?- pregunté, sin alzar la cabeza del piso.....- Pensé que te habías marchado.
- Quiero quedarme contigo, mal que mal este es mi hogar o ¿no?
- Ya no lo es más ¡estas muerto! ¡déjame continuar!
- No puedo, pues tu hora ya es finita, y tienes que venir conmigo, por eso he llenado tu taza de café, disfrútalo, será el último, y abre el cajón... son franceses, tus favoritos... cuando termines me avisas....

"son franceses" pensé, y no creía que iba a morir hasta que encendí el primero y me di cuenta de que estaba condenando a mi alma al poner ese cigarro en mi boca, porque él ya no era el que conocí hace veinte años atrás, se había convertido en alguien oscuro y malvado.... era el diablo en persona que venía por mi alma, para seguir condenándome por haber sido, alguna vez, una bruja más..... "son franceses" y di mi última exhalada.....


ESCRITO POR FRANCISCA KITTSTEINER
© Francisca Kittsteiner, 2008 - 2009.
- Franykityzado por Klaus, ©2009.