viernes, 10 de junio de 2011

PROBABILIDAD



Hay aguaceros de necesidades que se desbordan sobre el tejado de mi cuerpo y necesito respuestas rápidas o estoy segura que moriré sumida en la locura febril de una juventud que no estoy acostumbrada a vivir todavía.

Es como si todo el mundo supiera lo que sucede dentro de mi pecho, menos la única persona me interesa se entere; su indiferencia indiscriminada me hace vulnerable ante sus ojos y acapara mayores espacios de los que es sano y natural, pero no me interesa de verdad, porque tengo claro que algún día, se acercará, estando solos en el amparo de la caterva y sabrá lo que siento. Entonces y solo entonces, respiraré alegría y no nubes de smog cargados de penumbras.

Busco oportunidades para casualmente mirarle de reojo. Busco silencio y refugio en canciones con un vaho vehemente a su esencia, para apaciguar los buitres insidiosos que les gusta perseguirme cuando la cuidad se congela y sólo se escucha el aullido de un perro en las calles.  Busco el contacto de los rostros en la inocencia de un beso en la mañana, cómplice del coqueteo sutil, pero no hay luces de buenaventuras o rastros del camino equivocado.

Pienso que otra vez los Dioses se ensañaron conmigo, aunque no encuentro razón aparente para explicar su enojo. Quizás están tan aburridos como yo, de que no sea valiente y tome el destino en mis manos y de paso, el de él. Pero, si de todos los lugares del mundo, tuvieron que ponerme exactamente aquí, justo a 5 metros de distancia del que escribo, tiene que ser por un poder supremo o es un brote psicopático que se presenta con su nombre.

Hay tormentos de momentos opulentos que aún no se conciben, pero que pronto tendré para sacarle la lengua al planeta y decirle “¡Lo conseguí!”

Tal vez, es una forma indistinta que tiene la vida de despertarme a la realidad y mostrarme difuminada la imagen de lo que soñé hace tiempo, obligarme a pelear por ellos, a ser valiente, a no rendirme por esperar que las cosas tomen el rumbo que les corresponde, sino de encajarlos a presión y hacer que el cuadro quede terminado. Tal vez, soy solo yo escribiendo basura, de nuevo…


ESCRITO POR: FRANCISCA KITTSTEINER

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© Francisca Kittsteiner, 2008 - 2009.
- Franykityzado por Klaus, ©2009.